miércoles, 19 de octubre de 2011

"Me detuve a reflexionar sobre la amistad -Aristóteles menciona tres tipos de amistad: por interés, por placer y por el bien; pero sólo la que surge del bien merece llamarse amistad- Pues bien los conté con los dedos de mis manos para nunca olvidarlo."



¿Si la amistad es interesante, placentera y por ende buena? Hay que considerar la cualidad separativa de Aristóteles (dignísimo separatista de conceptos y muy cuerdo en estos días), pero en toda relación, por buena que sea (lo que suena, como prima, de una moral exhuberante), es a la vez placentera (se le quita valor al instinto placentero de toda acción humana), y por ende, por provocar placer, es debido poseer interés en tal placer. En cualquiera caso y si se le concede razón a Aristóteles y a tu acuerdo con él; veo que tu intención en la amistad es "totalmente bondadosa" y por lo tanto "interesada" (pues se malversa el interés, que en ningún caso debiera ser negativo, eso es modernidad económica y ética bárbara) y por obviedad, placentero, pues si el ser humano no se place con lo que hace, vive en contradicción. Y si tú consideras la amistad como algo "positivo", es primeramente placer (la parte instintiva e irracional), quien fecunda la relación (y por ello buena en términos aristotélicos), pero en consecuencia, una vez racionalizada, llega a ocurrir lo que mencionas, que se aleja totalmente del estado puro de las relaciones y esto es puramente mi parecer en el caso, es allí donde la sanidad se corrompe; cuando comienzas a catalogar la relación, limitarla, siendo que si por naturaleza se siente apetito, asimismo la relación se agota en su momento, y basta con que ocurra el hecho para saber si hay amistad o no.

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una más, que para el cosmos es tan pequeña